España envejece, es una realidad. Seguro que te has dado cuenta de que cada vez hay más mayores en los parques y menos niños y niñas jugando.
Esto es por la evolución demográfica del país, que se ha convertido en uno de los factores que más perjudican al sistema de pensiones públicas.
Nuestro sistema de pensiones se basa en la solidaridad intergeneracional, es decir, quienes están trabajando ahora pagan las pensiones de los que ya se han jubilado, y así sucesivamente.
Este sistema ha funcionado durante mucho tiempo pero la evolución de la pirámide de población en España está poniendo en riesgo su viabilidad.
Te lo contamos con más detalles.
También te dejo por aquí un vídeo interesante sobre las pensiones y tu jubilación 😉
España cerró el año 2020 con una población de 47.394.223 personas. No estamos entre los países con mayor número de habitantes de la Unión Europea pero tenemos una población bastante significativa.
Las características principales de nuestra población son:
Todos estos factores hacen que, actualmente, la pirámide poblacional española tenga forma de pirámide regresiva (o bulbo), con la base más estrecha que la zona central y con un alto número de personas mayores.
Es una pirámide típica de los países desarrollados, con una sociedad envejecida y con tendencia a serlo más.
El hecho de que los ciudadanos vivan más tiempo es sin dudas una señal del progreso de la sociedad, pero si lo unimos a la baja tasa de natalidad, la situación se vuelve difícil de gestionar.
La peor parte del envejecimiento de la sociedad es la pérdida progresiva de la población con edades entre los 20 y los 65 años, es decir, la población con edad de trabajar. Al perder esa población, también perdemos sus cotizaciones a la seguridad social.
El sistema de pensiones ha funcionado bien hasta ahora porque había más trabajadores activos que jubilados. El problema comienza cuando la pirámide poblacional se invierte, la población envejece y llegamos al punto de tener más jubilados que población con edad de trabajar.
Según el INE, en 2033 un 25,2% de la población estará por encima de los 65 años. La tercera edad será el grupo de población más amplio del país.
Así que, si sumamos el aumento de la esperanza de vida más el descenso de la natalidad más las altas tasas de paro, el resultado hace que el sistema actual de pensiones sea insostenible, ya que habrá más pensionistas que personas trabajando y cotizando a la seguridad social.
Como has podido comprobar, la situación demográfica en España supone un problema para la sostenibilidad del sistema público de pensiones.
Los gobiernos han llevado a cabo reformas estructurales en el sistema de pensiones y lo seguirán haciendo, por lo que seguramente veamos más ajustes en la edad de jubilación, en los requisitos para acceder a las pensiones, etc.
Ante tanta incertidumbre, la sociedad cada vez está más concienciada de la necesidad de ahorrar para mantener su nivel de vida tras la jubilación.
Hoy en día una persona que se jubila en nuestro país recibe una media del 80% de su último sueldo, pero no podemos ignorar que INVERCO y la OCDE vaticinan que para el año 2030 será del 58%, en 2040 del 54% y para el año 2050, el importe a recibir caerá hasta el 49% del salario cobrado.
Sin lugar a dudas, el ahorro es un complemento necesario para la pensión pública, sino, perderemos poder adquisitivo cuando nos jubilemos. Porque si a los jubilados de ahora ya les cuesta trabajo llegar a fin de mes cobrando el 80% de su último sueldo, ¿Qué pasará cuando te toque a ti y cobres menos de la mitad?.
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