Son muchas las personas que se plantean ahorrar o invertir: algunas ya tienen algún producto financiero y otras simplemente guardan el dinero en una hucha.
Pero claro, ¿crees que esa es la mejor forma de hacer crecer tu dinero?, ¿estas preparado para cualquier imprevisto que pueda pasar?
Pues no, y es por eso que hoy te voy a explicar en este artículo qué es la planificación financiera ideal y cómo conseguirla para que estés preparado para cualquier imprevisto que pueda ocurrir y que tu dinero trabaje para ti y se rentabilice de la mejor forma.
¿Listo?
¡Comenzamos!
👉¿Qué es la planificación financiera ideal?
La planificación financiera ideal puede parecer, a priori, un concepto complejo, difícil de definir y de poner en marcha. Por eso, vamos a empezar viendo qué significa.
Es decir, la función principal de una buena planificación financiera es prever cuáles van a ser los objetivos financieros que quiero conseguir a corto, medio y largo plazo y elaborar un plan de acción para conseguirlos.
Fíjate en la imagen de aquí abajo, donde te dejo un resumen de cuál es la «planificación óptima«:
- A corto plazo preparamos nuestro colchón anti imprevistos, es decir, es un dinero que tenemos que tener siempre disponible por si se nos estropea un electrodoméstico, el coche, nos ponen una multa, etc. Además de esto, debemos contar con un seguro de vida que nos cubra a nosotros y a nuestra familia en caso de fallecimiento y/o invalidez.
- A medio plazo nos centramos en trabajar con nuestro dinero para conseguir los objetivos que nos hayamos fijado para este tiempo (entre 4 y 9 años), además de no perder de vista tampoco el largo plazo. Por supuesto, todavía seguiremos contando con un seguro de vida, pero adaptado a nuestra planificación en ese momento.
- A largo plazo, por último, sólo nos tenemos que centrar en los objetivos que tengamos a largo plazo, tipo jubilación, por ejemplo, porque el resto de objetivos ya los habremos ido cumpliendo.
👉 Los pilares de una buena planificación financiera
Ya tenemos claro que para estar preparados para cualquier situación que nos pueda suceder necesitamos contar con una buena planificación a lo largo del tiempo pero, ¿cómo la consigo?
Para construir nuestra planificación ideal tenemos que seguir los siguientes pasos:
✔ Objetivos
Antes de empezar cualquier planificación necesitamos saber dónde queremos llegar, es decir, nos planteamos los objetivos que queremos conseguir:
¿Quiero ahorrar para mi jubilación?; ¿quiero acortar mi hipoteca y pagarla en menos años?; ¿quiero que mis hijos estudien en una buena universidad?
Los objetivos de nuestra planificación financiera los tenemos que definir de forma clara y concisa para poder ajustar nuestro plan de forma personalizada y así conseguir la estrategia perfecta para nosotros.
✔ Plazos
Realmente, lo más importante son los plazos, es decir, el corto, el medio y el largo plazo.
¿Por qué?
Porque cada uno de nosotros tiene unos objetivos más o menos parecidos, pero donde se personaliza una planificación financiera es en los plazos. Y te voy a poner un ejemplo para verlo más claro.
Imagina que tú y yo tenemos hijos, y ambos queremos que nuestros hijos vayan a la universidad a estudiar. El objetivo es el mismo, ¿no? Pues el plazo, y por tanto la estrategia, cambia cuando vemos que mi hijo tiene 5 años y el tuyo tiene 14.
Aunque el objetivo pueda ser el mismo, es el plazo el que va a marcar la estrategia a seguir para que podamos conseguir dicho objetivo 😉
✔ Herramientas financieras
Elegir la herramienta financiera correcta para cada proyecto es uno de los pasos más importantes.
Esto es así porque una misma herramienta financiera se puede usar para distintos objetivos pero dependiendo del objetivo y del plazo, debemos usarla de una forma u otra.
Es decir, yo puedo utilizar un PIAS para comprarme un coche dentro de 5 años pero también puedo usarlo para preparar mi jubilación dentro de 30 años.
Como puedes ver, una misma herramienta puede servir para distintos objetivos. Por ello es muy importante conocer todas las opciones que existen en el mercado y saber cómo utilizar cada producto para obtener los mayores beneficios posibles.
✔ Diversifica
Para conseguir la planificación financiera ideal hay que diversificar las inversiones. Y esto es algo intrínseco en este tipo de planificación, ya que para abarcar todos los plazos, no te va a servir con sólo un producto financiero.
¿Sabes por qué? Porque el producto financiero perfecto NO existe.
Por ello, hay que diversificar para encontrar esos productos financieros que se complementen entre ellos y nos ayuden a conseguir nuestros objetivos, creando así la estrategia perfecta para nosotros.
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