Después de una década de dinero barato, el Banco Central Europeo (BCE) dio un giro a su política monetaria desde el año pasado con el objetivo de parar la inflación de toda la Eurozona.
Ese es el motivo por el que no paramos de ver noticias anunciando subidas en los tipos de interés y, como consecuencia, las hipotecas y los créditos están cada vez más caros.
A primeros de febrero, el BCE anunció la primera subida de tipos de 2023 (nos situamos en el 3%) y también ha avisado que tiene la intención de aplicar otro aumento en marzo.
Para entender bien qué está pasando en la actualidad, nos tenemos que remontar a 2008, cuando explotó la burbuja inmobiliaria y vino la Gran Crisis.
Hubieron muchos factores para que esto ocurriera, pero a modo de resumen, esto fue lo que pasó:
Por lo tanto, el Banco Central Europeo decidió bajar los tipos de interés para que los bancos tuvieran más dinero y pudieran prestarlo a las personas y a las empresas, con el objetivo de reanimar el consumo y la economía.
Pero con la inflación descontrolada, el BCE cambia de estrategia económica.
Implica, nada más y nada menos, que el dinero sea más caro.
Los bancos, para prestar dinero a las empresas y a los hogares, piden el dinero al Banco Central Europeo, que les cobra un tipo de interés.
Hasta el 2022, los tipos estaban a 0 o en negativo, por lo que los créditos estaban baratos y fluían de los bancos a las empresas y a las personas. Como te conté antes, esto hace que el consumo se estimule pero afecta a los precios, ya que hay mucha demanda y éstos suben.
Con el fin de los tipos bajos, los bancos tienen que pagar más intereses por el dinero que el BCE les presta. Por lo tanto, eso repercute en los créditos y préstamos que se les conceden a las personas y las empresas.
En otras palabras: si un banco "compra" dinero al BCE por un precio, deberá "vender" ese dinero por un poco más de lo que le ha costado para no perder dinero.
¿Y cuál es la principal consecuencia de las subidas de los tipos? Pues que se frena el consumo.
Y esa es la nueva estrategia que está siguiendo el BCE: pretenden frenar el consumo para bajar la inflación.
El BCE ha anunciado que volverá a subir los tipos en marzo.
Está previsto que la subida sea de un 0,5%.
En su última declaración, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, comentó que el trabajo con las subidas de los tipos no ha llegado a su fin, ya que dependerá de la presión de la inflación subyacente.
En concreto, la inflación subyacente se calcula igual que la inflación general pero excluyendo los precios de la energía, los alimentos no elaborados, el alcohol y el tabaco.
Es la métrica que los bancos centrales tienen en cuenta para tomar sus decisiones económicas y financieras.
Iremos viendo qué decisiones toman los grandes bancos centrales y qué consecuencias tendrá para las hipotecas, los créditos y para la economía en general.
Ya que cuando se frena el consumo, el crecimiento económico se resiente y vuelve el fantasma de la crisis económica o recesión.